JEAN JACQUES ROUSSEAU

Es un orden político legitimo. La sociedad se rige por un contrato implícito entre los individuos que la componen, en el que cada uno cede parte de su libertad a cambio de la protección y seguridad que brinda la comunidad. Es una forma de establecer una sociedad justa y equitativa, en la que cada individuo tenga la misma libertad y los mismos derechos. Este contrato implica que todos los miembros de la sociedad deben renunciar a sus derechos naturales para formar un cuerpo político, que será el encargado de tomar decisiones en beneficio del bien común. (Rousseau, 1980).

Es el sistema político ideal en el que la soberanía reside en el pueblo y todos los ciudadanos participan activamente en la toma de decisiones políticas. En este sistema, la voluntad general de la sociedad es la única ley, y las decisiones son tomadas por el pueblo en su conjunto, en lugar de ser delegadas en un representante elegido. (Rousseau, 1980).

El hombre natural es aquel que vive en estado de naturaleza, sin la influencia de la sociedad y las leyes humanas. Este hombre es libre, feliz y autónomo, pero también vive en una condición de constante lucha por la supervivencia y es susceptible a los peligros y desafíos de la naturaleza. Por otro lado, el hombre social es aquel que ha sido influenciado por la sociedad y las leyes humanas. El hombre social vive en una comunidad y está sujeto a las reglas y convenciones que se han establecido para mantener el orden y la armonía dentro de la sociedad. (Rousseau, 1980).

El estado natural es la condición en la que vivía el ser humano antes de la aparición de la sociedad. En este estado, el ser humano vive en libertad, es decir, no está sujeto a las leyes, convenciones o restricciones impuestas por la sociedad. El estado natural se caracteriza por la igualdad y la libertad natural de los individuos.  La libertad natural es la capacidad de cada individuo para actuar sin ser coaccionado por la sociedad. Esta libertad se deriva del hecho de que el ser humano es dueño de sí mismo y de sus acciones, y no debe nada a nadie. En el estado natural, los individuos son libres para actuar de acuerdo con su propia voluntad, pero también son responsables de las consecuencias de sus acciones. (Rousseau, 1980).

Es un acuerdo entre los individuos de una sociedad para renunciar a su libertad natural y establecer un contrato social que garantice la protección de sus derechos y libertades individuales, así como la promoción del bien común. El pacto social es el acto mediante el cual los individuos se unen para formar una comunidad política y establecen un conjunto de leyes y normas. (Rousseau, 1980).

Una república es una forma de gobierno en la que el poder político reside en el pueblo y se ejerce a través de representantes elegidos. En una república, la voluntad general, que representa los intereses del pueblo como un todo, es la fuente última de la autoridad política. La república era la forma más adecuada de gobierno para proteger los derechos y libertades de los individuos, así como para promover el bien común. En una república, la soberanía reside en el pueblo y no en una persona o grupo particular, lo que garantiza que los intereses de la comunidad en general sean la principal preocupación del gobierno. (Rousseau, 1980).

La voluntad general se refiere a la voluntad de la comunidad como un todo, en contraposición a la voluntad de los individuos o de un grupo particular. La voluntad general es la expresión de los intereses comunes y generales de la sociedad, y se deriva de la razón y el bien común. La voluntad general es la fuente última de la autoridad política, y debe ser el objetivo principal de cualquier gobierno legítimo. (Rousseau, 1980).

La voluntad común se refiere a la voluntad de los individuos dentro de una sociedad que comparten intereses similares, pero que no necesariamente representan los intereses de la comunidad como un todo. La voluntad común puede ser influenciada por la opinión pública, la propaganda y la persuasión, y puede cambiar con el tiempo y las circunstancias. (Rousseau, 1980).

Es el criterio de valorización de esa lengua a partir de su contexto: cantidad de hablantes, difusión geográfica y producción cultural. (Saussure, 1916).

Es sujeto (Actúa como soberano) y objeto (Se entrega a sí mismo por el bien común).

Mantener al ciudadano ideal desde un marco natural y una sociedad corrupta a partir de la desnaturalización del hombre natural a uno social, la exploración activa del ambiente, encontrar un propósito en la vida, educar mediante la acción, la capacidad de relacionarse con su sociedad y el perfeccionamiento de la razón con el sentimiento

Es posible sobrevivir sin un líder que tenga la autoridad. 2). El pueblo tiene la función de soberano y acorde a una ley común. 3). Naturaleza del hombre formado por: el sentido, la utilidad y la razón. 4). El mal no está en el hombre, sino en las relaciones de la sociedad. 5). La libertad es lo que debemos buscar y restituir. 6). La igualdad solo la alcanzará los iguales. 7). Los hombres en estado natural son iguales entre sí. La sociedad corrompe a los hombres en medida que el contrato social no cumple. 8). El Estado debe evitar la desobediencia de la voluntad general.